Sigo con rabia contenida, con ganas de llamarte y decirte hasta del mal que te vas a morir, con ganas de darte las gracias por no solo engañarla a ella, sino engañarnos a todos con tu cara de yo no fui, con tus modales y supuesta moral y compostura. No eres más que uno del montón, un vende humo como aquellos que se dedican a decirte como hacerte millonario asistiendo a seminarios que cuestan un montón de pasta y no sirven más que para oír pendejadas.
No te llamo porque ella me ha pedido no lo haga, pero como las cosas vayan a más, mejor es que pidas asilo político en tu propio país, pues no habrá quien me detenga para decirte a la cara lo poco hombre que eres y lo bajo que ante mi has caído.
He dicho!
nota mental: no importa de donde vengan, no importa la nacionalidad al final todos son iguales
nota mental dos: Ves la foto? Pues hala coge por ahí y vete a donde el diablo perdió la cola!!!
